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CATAMARCA - D Í A 2 - |
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FOTO: Juan Marcelo VILA
Adorando a Inti (el diós sol) poco después del amanecer, que nos quita el frío y nos da energías.
FOTO: Juan Marcelo VILA
También ilumina y hace resplandecer esa pampa de arena gruesa y ceniza volcánica.
- Allá atrás los volcanes Cerros Colorados y Vallecitos -
FOTO: Hugo BERRY
Esa "avenida" que parece hecha y nivelada con topadora en realidad la construye la naturaleza con sus herramientas;
nieve, hielo, sol, agua y viento. Marvillosa capacidad
FOTO: Eduardo CINICOLA
A poco de andar encontramos uno de los tantos monolitos de toba volcánica.
Este a punto de colapsar.
FOTO: Eduardo CINICOLA
Mis amigos se apresuran a acercarse para observarlo con curiosidad...
FOTOS: Hugo BERRY - Juan VILA - Andrés PINO
Y a tratar de sostenerlo con sus brazos cual émulos del Atlas de la mitológía griega cargando la bóveda celeste.
FOTO: Andres "Andy" PINO
Y el recorrido sigue hacia el sur, buscando la "grieta 24"
mientras observamos como aquellas mencionadas herramientas de la naturaleza, solo han dejado acá esos pequeños torreones
de lo que fue una gruesa capa de varios metros de toba volcánica tipo ignimbrita.
la arena sobre la que transitamos es en lo que la han convertido.
FOTO: Hugo BERRY
¿Cuántos millones de años les habrá tomado hacer este trabajo?
No importa, no hay apuro, ellas tienen desde el principio de los tiempos hasta la eternidad.
FOTO: Hugo BERRY
A esta altura ya sentíamos que el sueño nocturno nos había transportado mágicamente a la luna
o a otro planeta.
FOTO: Hugo BERRY
Los contraluces que provoca la iluminación matinal no hace lucir todo el esplendor del lugar.
En uno de esos balcones que se forman en la ladera derecha del Vn Vallecitos, hemos encontrado un espectacular balcón/mirador que luego visitaremos.
FOTO: Andres "Andy" PINO
Siii... estamos en Marte, no hay dudas.
Elon Musk nos ha elegido para su primer viaje interplametario !!! 
.
FOTO: Andres "Andy" PINO
Más vistas de "Marte".
FOTO: Juan Marcelo VILA
Pareciera que la ignimbrita se derritiese como una torta helada puesta al sol.
FOTO: Juan Marcelo VILA
Es enorme, solo podremos recorrer una mínima parte.
FOTO: Eduardo CINICOLA
Nos metemos por la "grieta 24" que se presenta como una ancha avenida
que alguna vez pensamos que nos permitiría salir de allí hacia el sudoeste.
Pero no, ya habíamos descubierto que un tremendo derrumbe la ciega a mitad de camino.
Fuimos hasta allí y estamos regresando.
FOTO: Eduardo CINICOLA
Desde la meseta de toba (a la cual se le han formado las grietas de las que hablamos),
tenemos otra perspectiva del extremo norte de la pampa.
FOTO: Eduardo CINICOLA
Desde arriba de la meseta lo fotografiamos al Tape saludando y vemos, allá abajo
la "grieta 24" y nuestras huellas frescas que por suerte se borrarán con el viento y el agua del deshielo.
FOTO: Juan Marcelo VILA
Inmortalizados en los Bayos, Edu, Eladio y Andy.
FOTO: Juan Marcelo VILA
Tobhias acaba de repostar combustible en la camioneta.
FOTO: Juan Marcelo VILA
Paisaje de sueño "mágico".
FOTO: Juan Marcelo VILA
Y como en todo sueño "mágico" aparecen extraños rostros.
FOTO: Eduardo CINICOLA
Nos despedimos, ya nos tenemos que ir.
Pero antes ascenderemos hasta el punto rojo en las laderas de Vn Vallecitos, donde tenemos detectado un sitio que oficia de magnífico mirador.
FOTO: Andres "Andy" PINO
Desde aquel mirador Andy nos deleita con estas magníficas fotos.
FOTO: Andres "Andy" PINO
Es la mejor forma de apreciar la meseta de toba agrietada, que acaba en la Pampa de los Bayos, que se encuentra en el extremo derecho, invisible por ahora en las fotos.
FOTO: Andres "Andy" PINO
Vean ese laberinto de grietas, imposible de recorrer en una visita.
Ya hemos ido seis veces y nos queda aún mucho por conocer.
FOTO: Juan Marcelo VILA
Andy "gastando" el paisaje con la cámara.
FOTO: Edgardo "Tape" ARRIOLA
Los muchachos exultantes con esa vista desde los 5.300m de altura.
FOTO: Juan Marcelo VILA
Chau Pampa de los Bayos, nos vamos ¿será hasta la próxima?
FOTO: Juan Marcelo VILA
En el largo camino a Antofagasta de la Sierra, debemos cruzar el Salar de Antofalla.
FOTO: Juan Marcelo VILA
Dura mezcla de tierra y sal con grandes terrones de filosas aristas.
FOTO: Eduardo CINICOLA
Y ya del otro lado del salar, con esta acuarela nos despedimos de nuestros amigos...
El Peinado, los Dos Conos Este y Oeste, el Falso Azufre y el gigantesco Cóndor. Abajo; el Salar de Antofalla.
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EDUARDO CINICOLA
Enero de 2022 |
 
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por Andrés PINO (Overlander)
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Puedes leer el relato de cómo comenzó esta expedición en:
Laguna del Cuerno en la Sierra de la Punilla 
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