Finalmente a las ocho en punto de la mañana, los primeros rayos del sol que se asomaba en un horizonte extrañamente plano, daban en nuestros rostros y concluía nuestro estado de hibernación.
Calentar unos cafés con leche que pedían a gritos nuestros estómagos, reordenar todo y ponernos en marcha, nos demoró mas de dos horas.
Confiábamos en que en una hora o dos conoceríamos de cerca al Zapaleri (ahora iluminado a pleno por el sol matinal), la Laguna Vilama y, a última hora de la tarde estaríamos ya "afuera", camino a Santa Catalina.
- Ché, Lucho, ese que pensábamos anoche que era el Zapaleri, no es el Zapaleri. Es el Vn Tinte de 5.850m (200 metros más alto que aquel) y también limítrofe. El Zapaleri se encuentra más al sur, por aquella quebrada y tapado por el Brajma (petisón y mocho -5.350m).
- ¿Pero aquella que vemos a la derecha, sí es la Laguna Vilama?
- Si, pero si queremos ver al Cerro Zapaleri y llegar al Paso Zapaleri tenemos que ir al sudoeste unos 40 a 45 Km y regresar.
Esos 90 Km entre ida y vuelta con sus miles de curvas, vados y mallines congelados nos insumieron una jornada completa más.
El asunto fue que el crepúsculo nos halló nuevamente a orillas de la Laguna Vilama !!
Otra vez a dormir sentados en la camioneta con casi 20 grados bajo cero!
Otra vez 13 interminables horas de respiración forzada!
Pero como reza el dicho "Sarna con gusto, no pica".
Los paisajes que nos descubre el sol cuando regresa nos hacen olvidar de cualquier incomodidad sufrida.