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Los pilotos de tres de los vehículos que integraron la primer expedición en busca del Paso del Colifa (Martín Barletti, Norberto Suarez y Rómulo - con Fernando Rubio de acompañante de Martín, Alberto Casado coequiper de Norberto y Luis Pérez con Rómulo), no se dieron por vencidos y, para mayo del 2002, convencieron a Pepe Ferreira y su hijo Hernán, que los acompañaran a una segunda expedición.
Esta vez atacarían desde el Oeste.
Subirían desde Belén al Peñón, cruzarían la gran caldera del volcán Galán e intentarían bajar hacia Compuel, lugar donde habían abandonado en la expedición anterior.
La bajada hacia Tacuil había sido desestimada por las condiciones del terreno observadas en la incursión previa.
También llevaban la misión de hallar el lugar propicio para "fundar" COLIFALLA.
Nuevamente Fernando Rubio hace las veces de cronista y nos cuenta su visión de aquella odisea:
El Paso del Colifa y Colifalla.
Escrito por Fernando el 06 de Mayo de 2002 a las 17:03:14 IP=:
Al bajar de LT1 (Los Techos de América 1) , recordé la fábula de Napoleón, que buscaba "soldados no solo buenos sino con suerte".
Al bajar de LGP1 (La Gran Puna 1) , le agregué: "Llevar mucho oxígeno".
En esta ocasión y completando la trilogía, agrego la necesidad de "contar con una buena cuota de sacrificio y trabajo en conjunto, para poder movernos bien como grupo".
Este era, al menos para mí, un viaje distinto. Porque estamos viviendo una situación inédita que al menos a mí personalmente me hizo pensar y repensar sobre la conveniencia de armar esta travesía.
Varios días antes hablamos muchas horas con Jesús Jausoro sobre esto, y cuando finalmente decidimos por el "GO", la verdad que la ilusión de los que se quedaban me sirvió mucho de envión.
Nació como una idea de borrachos, como todas las nuestras. Y decidimos juntarnos un Sábado en la Baticueva de Castelar (que a esta altura es algo así como nuestra Meca..., ahí solo se va a pensar cosas grossas).
Inicialmente podíamos ser unas 8-9 camionetas, pero con el correr de los días y por distintos motivos quedamos solo 4 chatas con sus tripulaciones:
Norberto Suarez y Alberto Casado en la Defe blanca.
Rómulo y Luis Pérez (un cordobés simpatiquísimo y laburador, charlatán como todo cordobés -yo lo soy, vale aclarar-) en el Wrangler de Rómulo.
Pepe Ferreira y su hijo Hernán en un Jeep IKA espectacular.
Y Martín "et moi" en la Chero.
Los cuatro vehículos y parte de la tripulación.
Salimos medio desparramados el Martes a la noche.
Norberto-Alberto y nosotros salimos casi a la misma hora, ellos de La Plata y nosotros de Florida (provincia de Buenos Aires).
Ellos le iban a pegar derecho (total se puede dormir en la parte trasera de la ambulancia) y nosotros queríamos hacer unos 400km antes de dormir en algún hotel.
Terminamos saliendo tipo 22:00hs porque la Chero la terminamos a las 20:00hs. Es decir una vez mas salimos sin probar algunas cositas, error que pagaríamos horas mas adelante. Una vez mas, íbamos cargados hasta los dientes, e indudablemente cuanto más difícil el objetivo, mas artillería se lleva y se usa.!!!!
A las 2 de la matina nos metimos en Venado Tuerto a dormir.
Como dato (para Pablito, viejo domador de gatos) impresionante la noche de Venado Tuerto.
A Martín le costó dormirse pensando lo que estaba dejando pasar...
Miércoles 1
Salimos 8:30 de la matina, y a las 2 de la mañana siguiente, 16 horas mas tarde, aterrizamos en Antofagasta de la Sierra.
Norberto y Alberto le pegaron derechito y llegaron cerca de las 8 de la noche.
En cambio, los dúos Rómulo-Luis y Pepe-Hernán salieron directamente el miércoles a las 6 de la matina y le dieron hasta Belén donde dormirían y saldrían a la mañana siguiente tempranito a encontrarnos en el Peñón.
Jueves 2
Diana a las 9 para desayunar, cargar nafta si hubiera habido, intentar arreglar una goma desecha en el ripio la noche anterior o conseguir otro auxilio, e ir desde Antofagasta a El Peñón, donde a las 11:00 aterrizarían Rómulo-Luis y Pepe-Hernán. De ahí saldríamos para el Galán.
Durante el desayuno, Norberto (jugador de toda la cancha, José María) confiesa que necesita unos minutitos mas para bajar algo de vinito que tomaron la noche anterior con Alberto tratando de bajar unas milanesitas de llama...
Luego de desayunar, Julieta (quien dirige la hostería municipal y quien nos mima cada que vamos) me llevó a hablar con Don Catalino Soriano, lugareño y baquiano del lugar, (recomendado por Henri Barret), quien nos dio buenas esperanzas de encontrar el paso tan buscado.
Salimos las 2 chatas para el Peñón y a eso de las 12:00 aterrizan los 2 Jeeps.
El IKA llega con una avería en una cañonera, la cual Pepe, Hernán y Luis solucionaron en una horita, soldando con 3 baterías en serie. Una maravilla.
14:00 hs del Jueves y comienza el rock ‘n roll.
Salimos para el Galán. Camino conocido. Lo hicimos en Octubre pasado y seguimos esos tracks hasta lo relevado y de ahí en mas, apuntamos a Río de los Patos y buscar algún cruce.
Le dimos hasta las 18:30, momento en el cual transitando paralelo al Río descubrimos lo que sería el lugar final de la fundación de Colifalla.
Encontramos un grupito de casuchas de adobe de algún puestero dispuestas en forma de "U" y que nos cobijaron del viento.
Colifalla
Hicimos campamento y dimos por seguro que esta es la ubicación final de Colifalla, la cual esta a 20mts de un bracito del Río de los Patos.
Campamento en Colifalla.
Ubicación GPS esta disponible para todo futuro visitante o comprador de tierras.
Luego de la emoción de la fundación, comenzamos a analizar las distintas tareas a ser asignadas en este nuevo asentamiento.
Norberto aceptó ser el cantinero y dueño del bar.
Rómulo cambia su rubro y se dedicara a vender alimento para llamas.
Martín regenteara la "casa de citas" para ponerlo en forma suave, dado que no podemos desaprovechar su experiencia en el tema (y creo que le iba a pedir a Pablito algo de ayuda).
Yo me ofrecí al puesto de periodista, (escribir al cuete me sale bien).
También quedo establecido que Julieta sería la patrona del lugar.
Esa noche dormimos en Colifalla a 4300mts de altura, con un paisaje único, y con una noche azul y estrellada como solo esta hermosa Puna sabe ofrecer.
Tocamos el cielo con la mano.
Nos agrupamos en una de las chozas de adobe y cenamos todos juntos. Norberto peló una botella de Coca o de tinto, (no me acuerdo bien).
Viernes
Esperamos que levantara el sol y asomamos luego de una fresca noche.
Mientras Martín, Pepe y Luis arreglaban los amortiguadores de la Chero, Rómulo y yo nos adelantamos a investigar como cruzar el río, y encontramos un posible lugar.
Volvimos, cargamos las chatas ya reparadas y ¡a cruzar el río!.
Lo que parecía fácil se convirtió en un mallín congelado que nos chupó a los 4 vehículos durante 2 horas.
Rómulo "hasta las manos".
Usamos todo absolutamente todo lo que teníamos, estacas, anclas (Sandrito; no me retes, la tengo que arreglar ya que la usamos a destajo y la destartalamos un poco), palas, planchas, malacate, hasta le pedimos ayuda a los bomberos de Colifalla, y finalmente cruzamos.
De Martín, ni hablar.
Y ahora comenzó lo mas lindo.
Empezamos a ganar altura rumbo a cruzar las sierras de Vázquez, hasta que luego de unas 3 horas de subir y chivar, llegamos a 4800mts en la cresta de una montaña, desde donde se veía el valle de Compuel.
Vista del Valle de Compuel desde la cima de la Sierra de Vázquez.
ÉXITO!!!!!
Es decir que se podía cruzar. Ahora habría que ver si se podía bajar.
Luis y Hernán se pusieron a investigar a pie (si, a pie..., a 4800mts) y decidimos tirarnos por la ladera de la montaña, por 2 lados distintos.
Con Martín nos tiramos por un costado, por donde era claro que no se subía si es que hubiera que retroceder.
Los demás fueron por el otro y ahí existía la chance de subirlo si hiciera falta.
Bajamos y bajamos, unos 800mts hasta los 4050mts, pasando mallines, cortadas, piedras y arenales.
Todo era alegría y optimismo, hasta que la bajada se encajonó y quedó dentro de una quebrada angostita por donde no se podía pasar.
Como eran las 18:30hs, decidimos parar ahí y hacer noche.
Mientras todos armaban las carpas, nos fuimos con Luis río abajo y vimos lo que no queríamos ver. Estabamos a míseros 4km de Compuel (luego se comprobó que no era Compuel sino el Puesto de Don José).
Allí estaba, a la vista, pero había unas piedras enormes entre "Compuel" y nosotros.
Luis, viejo "piedrero" cordobés me sentencia: "por acá no pasamos".
Así que: vuelta al campamento.
Cenar, planificar que hacer mañana y a hacer nonito.
Con Martín, pusimos oxigeno en la carpa y dormimos como angelitos...
Fue una noche un tanto triste. Si bien habíamos encontrado el paso, ya estabamos saboreando el sabor de la victoria total y nos faltó este pucho.
Pero lo peor era que para irse de ahí, había que subir los 800 mts de desnivel que habíamos bajado en 1,5 hs.
Así fue que a las 6 de la matina del Sábado nos despertó Rómulo a todos para poder salir temprano, cosa que hicimos 8 o clock.
Comenzamos a subir lentamente (ahora entiendo a Serrat cuando dice que le gusta mas la cuesta abajo que la cuesta arriba) porque los arenales, las piedras y los mallines complicaban todo.
Finalmente a las 12:00 llegamos nuevamente arriba a los 4800mts desde donde nos habíamos tirado la tarde anterior.
La ultima parte de la subida fue mortal.
En el caso de la Chero, en primera-baja al mango escupiendo piedras y arena por todos lados.
Los 2 Jeeps la subieron de taquito y la Defe la peleó a muerte con una cubiertas que no eran para ese suelo, para finalmente subir colgada de Rómulo.
La subida se llevó como peaje una cubierta de Romulín.
Regreso del Valle de Compuel visto desde la cima de la Sierra de Vázquez.
Mediodía y comenzamos la bajada hacia Colifalla. Pero había que cruzar el río nuevamente y "ni a palos" nos queríamos clavar otra vez en el mallín helado (tendrían que haber visto a Luis sacándose los pantalones y cruzando el riacho en tarlipes, con el agua helada, para medir la profundidad...).
Finalmente cruzamos sin dificultad. Seguimos rumbo norte. Volvimos a pasar por Colifalla, saludos alusivos, y continuamos desandando el camino por el Galán, su famosa subida, para llegar a El Peñón a las 18:00hs.
En El Peñón le regalamos a Elina, la delegada municipal, los alimentos que teníamos (aquí ella le da de comer a 75 personas diariamente), Alberto-Norberto levantaron al maestro del pueblo y salimos para Belén.
3 horas de viaje, una cubierta de Pepe destruida, y mucho polvo mas tarde.
A a eso de las 21:30 estábamos las 4 chatas en la YPF de Belén, donde todos hicieron noche menos Martín y yo que decidimos viajar unos 200kms mas, para hacer el regreso del día siguiente un poquito mas corto.
Grave error el nuestro. Salimos a las 10:30 de Belén, llegamos 11:15 a Aimogasta y decidimos seguir. No tenia sentido hacer solo 60km. Para eso nos hubiéramos quedado en Belén con toda la banda. Seguimos y ahí empezó otro calvario. Hasta las 4 de la mañana del Domingo y 400km mas lejos no encontramos hotel!!!
Luis nos había prevenido y no le dimos bola.
Íbamos de pueblo en pueblo y en ninguno había hotel.
En uno que parecía grandecito (San Martín, Pcia. de La Rioja) llegamos a las 2:00AM a la YPF y había una bailanta en la estación de servicio!!!! Pero minga de hotel.
A las 4AM nos clavamos en un hotel de Deán Funes y salimos a las 11:30 para Bs.As., adonde llegamos a las 21:00hs, no sin antes pelear por la nafta por el precio absurdo o porque no tenían tarjeta, o porque te vendo solo 20$...en fin... En el viaje nos hablamos varias veces con Norberto que nos contó que les llovió a la salida de Belén con lo que se inundaron todos los badenes, así que tuvieron un baile adicional...
Y así va terminando otro hermoso viaje.
Un viaje para agradecer a los compañeros de ruta, un fierro total. Pepe y Hernán, que "no son argentinos", porque laburan y en silencio. Ayudan y hacen...
Luis y sus anécdotas.
Romulito medio tumbado por la falta de oxigeno.
Norberto y Alberto, con quien yo ya viaje muchas veces y me siento en familia.
Y porsu, mi parejita, Martín, un pingazo.
Todo el grupo, una masa.
Pero también para agradecer el aliento de la barra: Piri, Marcelo Velasco, Jesús, Ale Roldán, Pablito, Sandro, etc, etc, etc.
Yo en particular siento que dadas nuestras circunstancias, hay que ser muy agradecido, por poder hacer esto que nos gusta. Porque nos da la oportunidad de ayudar aunque sea una pizquita a otros, y porque cada vez que nos subimos a la chata, nos subimos nosotros, nuestra familia, nuestros amigos, nuestros amigos lejanos como Charlo, Jorgito o Adriano.
¿Qué queda ahora?
Cerrar de una buena vez el Paso.
Quizás volver a Compuel, subirse a una mula y buscar esos fatídicos 4km por otro lado y continuar con la obra. Poblar Colifalla y convertirla en la reserva moral de esta sociedad.
Hay un montón de puestos libres, así que es cuestión de candidatearse.
Ya hay intendente, patrona de la cuidad, bar, diario, alimento para llamas.
Es cuestión que c/u busque lo que tenga ganas de hacer.
Gracias a Jerte, Colifalla se va a convertir en nuestro cántaro de alegrias...
Fernando Rubio
Posible recorrido (naranja) de la segunda expedición y localización de Colifalla
Falta el sector Oeste (cruce de la caldera del volcán Galán).
En lila: Recorrido de la expedición anterior.
Vista satelital tridimensional del cruce de la Sierra de Vázquez.
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{1} Primer intento desde el Este
"Primer Expedición"