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Ubicación de PISAC en el Valle Sagrado.
Las ruinas de la ciudadela de PISAC fueron, al margen de Machu Picchu, las que más nos gustaron.
La caminata para recorrerla es realmente deliciosa.
Pisac consiste en una ciudad completa, que se autoabastecía y, probablemente abastecía tambien de alimento a Cusco.
Deslumbra y asombra el trabajo que representa la construcción de tantísimas terrazas de cultivo, perfectamente niveladas en las laderas de la montaña, provistas de tierra fértil e ingeniosos canales de riego.
Posee tres niveles de edificación muy bien diferenciados.
En el nivel más alto, las casas y casamatas defensivas usadas por los militares o guerreros.
En el ángulo superior izquierdo de esta foto podemos ver algunas de esas viviendas.
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Si bien las rocas que componen los muros de viviendas y casamatas no han sido talladas con mayor esmero, es notable ver como pese a no poseer argamasa, han subsistido mas de 500 años en sus posiciones.
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A un costado y separado de la ciudad por un profundo cañadón se encuentra el cementerio, cuyas tumbas a pesar de haber sido talladas en un acantilado, han sido saqueadas por los huaqueros.
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Para acceder a la ciudadela es menester atravesar un túnel natural, fácil de proteger en caso de ataques. |
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Un atalaya de observación al borde de un acantilado.
Desde allí se podía vigilar todo el entorno, hasta las montañas vecinas.
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Todas las casas poseen hornacinas en sus muros y salientes en las rocas superiores para poder atar con tientos (lonjas de cuero) los maderos que sostenían el techo.
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Son muchísimas las casas que pudimos visitar en esa recorrida superior, supongo que, aparte de guerreros también vivirían en ellas, los trabajadores de las extensas terrazas de cultivo.
Una torre de combate perfecta, en la cima de otro peñón.
Como los combates se hacían mayormente utilizando piedras como proyectiles, la altura ponía la fuerza de gravedad de parte del defensor.
Desde otro peñón podemos divisar el actual pueblito de Pisac, el río Urubamba y la carretera que nos ha traído desde Cusco.
Después de caminar por casi dos horas, comenzamos a ver las construcciones del segundo nivel, más bajo.
Algún sendero nos llevará hasta allá. Vemos también, más abajo el Valle del Río Urubamba y, en un extremo, el río mismo.
Era el sector de los sacerdotes y astrónomos.
La factura de sus muros es mucho mas esmerada. Tal como en los templos.
Está "a caballo" entre dos picos de aquellas montañas, y si se fijan bien verán como dos senderos conducen a sendos puestos de vigilancia y defensa, mientras que otro rodea aquel morro.
Una escalera de piedra se adivina bajando hacia la izquierda, hacia otro sector de la ciudadela.
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Desde cualquiera de los lugares por los que hemos caminado esa mañana, la vista es espectacular.
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Acá vemos un detalle del pulimento y perfecto encastre de las rocas que conforman los muros.
Estas están talladas, además, en tamaños y formas homogéneas.
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Las "calles" interiores, "solo para peatones".
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El centro de este observatorio, el Intihuatana. Mediante la sombra del sol, proyectada por esta piedra natural (rota por algún vándalo), los sacerdotes astrónomos determinaban las épocas de siembra y cosecha.
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Parte del sistema de cañerías que conducían el agua dentro de la ciudad.
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Desde allí observamos, en un nivel más bajo, el barrio o sector de la "clase alta" de esta sociedad.
Otra vista del sector de los sacerdotes y la extensa escalera de piedra que baja al barrio de los "adinerados".
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Recorriendo las casas del sector de la casta dominante.
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Desde allí todavía debimos descender unos cuantos metros más por hermosos senderos entre terrazas de cultivo y llenos de diminutas flores amarillas y lilas.
Fue un día de dicha completa. Solo faltaba llegar al pueblito a comer algo, estábamos famélicos de hambre...
Además en Cusco visitamos los siguientes lugares, de los que aquí les mostramos fotos:
y El Valle Sagrado de los Incas, con:
Pisac Hermosa ciudadela con extensas terrazas de cultivo.-
Ollantaytambo Otra ciudad Inca cuyos habitantes supieron derrotar a los españoles
- Chinchero Mitad Inca, mitad española.
Y...¡ Por supuesto !..., cómo llegar a Machu Picchu.
Machu Picchu está a unos 100 Km de Cusco, 60 de los cuales se puede hacer por carretera, pero indefectiblemente los últimos 40 solo se pueden realizar en ferrocarril o caminando en una excursión de tres dias completos por el "Camino del Inca" que trepa hasta los 3650 metros sobre el nivel del mar y luego desciende hasta los 2400, en que se encuentra la magnífica ciudadela.
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Cómo comenzó este viaje de aventura
