Agosto de 2003 Día domingo 10: Volvimos al camino secundario, de allí a Tucumán. Circunvalamos la ciudad y nos dirigimos por la RN9 hasta el desvío que nos llevaría por una estrecha senda, entre la selva, hacia el Viaducto Saladillo. Todo se desarrollaba a la perfección y, antes del mediodía, ya estábamos al pié de aquel gigantesco viaducto de ladrillos construido a fines del siglo XIX para que pase por él el ferrocarril del Norte (ex Gral. Belgrano) que conduce a Bolivia por La Quiaca/Villazón. Pablo y Juan Cruz (los más jóvenes del grupo) subieron hasta el nivel de las vías, Federico se tentó e hizo lo propio. Tomamos algunas fotos y salimos de raje. El próximo destino sería el Dique "El Cadillal", zona de miniturismo de Tucumán donde teníamos previsto almorzar. Encargamos unas empanadas y nos fuimos a la orilla del lago a "darles su merecido" junto con unos salames que había provisto Piercarlo. Con la modorra propia de la siesta de un hermoso día soleado, partimos hacia nuestro próximo destino: Confluencia 26-65. Nuestras fuentes: fotos satelitales y cartas topográficas, nos habían mostrado a esta confluencia como muy fácil de lograr, "casi" sobre un camino secundario de tierra que unía La Candelaria con Rosario de la Frontera, muy cerca de un caserío denominado San Esteban. Abandonamos la RN9 rumbo a La Candelaria. Andy y Piercarlo le imprimían un ritmo rápido al andar. Detrás y como en un saltadunas íbamos Pablo, Federico, Juan Cruz y yo en la Ladita Verde. Pasando un vado siento que la rueda trasera izquierda se desinfla. Paro. Verifico y... es cierto, está pinchada. Ahí mismo recuerdo que en el reordenamiento de herramientas, el único gato hidráulico fue a parar a la chata de Andrés. Urgente, radio y a llamar a Andy. A los pocos minutos ya estábamos nuevamente en marcha con la rueda cambiada. En el camino se nos cruzaban todo tipo de animales, hasta una piara de chanchitos a los que "casi" tuvimos que ejecutar por su manifiesta actitud hostil que ponía en peligro nuestras vidas. De haberlo hecho habríamos tenido que asarlos allí mismo, en el lugar, para que no polucionaran el ambiente con mal olor y, para evitar que las aves carroñeras se amontonaran a devorar los cadáveres, hasta habríamos sido capaces de comernos los restos de los infortunados animalitos. Pero teníamos un objetivo superior... La Confluencia. Pocos kilómetros mas adelante los GPSs nos indicaron que el punto en cuestión se hallaba a solo 42 metros del camino.... en medio de un espeso monte de espinos. A juntar coraje, cámaras, GPSs y a adentrarnos en la espesura... Justo en ese momento se acerca por el camino un viejito pedaleando en su destartalada bicicleta y mirando con ojos desorbitados semejante comitiva llena de aparatos electrónicos y cámaras y antenas y... En eso, Piercarlo, mirándolo fijo a los ojos y en su particular idioma ítalo/argentino le pregunta: ¿Es aquí donde aparecieron los OVNIS? No señor, por aquí no. Pero si van a meterse por allí, tengan cuidado porque hay un alambrado. Dicho esto, perdió su asombro y su interés y se fue pedaleando cansinamente, imagino que pensando... "¡Gringos Locos!!!". Nos metimos entre los espinos. Encontramos el alambrado del que nos habló el viejito. Lo saltamos uno a uno haciendo equilibrio y tratando de no clavarnos mas espinas. No es fácil hallar un esquivo punto en medio de aquel cerrado monte. Por acá, por acá!! Me estoy acercando!!!. No, No, me estoy alejando hacia el Oeste!!! Ché!! ¿Dónde queda el Este acá? No sé bién, pero mirá el sol. Si, el sol está arriba y qué? Otro que GPS en mano grita desde detrás de otros arbustos: Acá está!!! Lo tengo, solo me faltan unos 10 metros al sur, pero por acá no se puede pasar. No, No, acá está mirá 001,002 (se refiere a las milésimas de minuto, desplazado del ansiado quíntuple cero). Esperalo, esperalo que copie bien los satélites. Luego de un rato la ansiada foto al GPS mostrando el S 26:00,000 W 65:00,000 Foto al norte, foto al Este, foto al Sur, foto al Oeste. Ché, pero todas las fotos son iguales, se ven solo ramas y espinas. Y la famosa discusión; que no se deben ver personas, que no importa, que sí se deben ver, que hay que sacar una foto a cien metros, que no se vean las chatas, que sí se tienen que ver. Final: 80 fotos por confluencia. Con gente, sin gente, con chatas y gente, sin chatas, con chatas sin gente, con gente y sin chatas, con GPS, sin GPS, a cien metros (una para mi suegra).... etc, etc.... Listo, ya está, apuremos, apuremos que la próxima confluencia espera. La siguiente 25-65, quedaba unos kilómetros al norte de Metán, muy cerca de la RN9/34, a escasos 700 metros del asfalto. Nos subimos a los vehículos. Andy le imprimió un ritmo alucinante a su andar por el ripio. Saltando lomadas y pasando vados "como venía", atrás la Lada Niva Verde no le perdía pisada y se mantenía casi dentro de la polvareda de "Nikita" (La Niva Blanca de Andy). En poco tiempo llegamos a la rotonda de Rosario de la Frontera. De allí con rumbo norte hacia Metan S31-W64 S27-W65 S26-W65 S25-W65 S28-W64 S25-W66 S24-W67 S25-W67 S25-W68 S29-W64 (Oprima el botón de la confluencia de la que desee ver Relato y Fotos) - Para leer toda la travesía, comience de la primera de la izquierda - Ver los integrantes del grupo Volver a Travesía de las Confluencias Página Ppal. Volver al Menú Principal de Viajeros4x4